(by Agustin Antunez Corrales & ISMA: "Iniciativas de Sostenibilidad Medioambiente y Autogestion")
¡Felicidades! Mam8n@s!
¡Felicidades! ¡Mamon@s! Es un llamamiento simpático a toda la humanidad, a sus niñ@sy, y en particular a l@s mayas, para felicitarl@s y agradecerles su apoyo por un gran descubrimiento que acabamos de hacer.
El descubrimiento consta de una hipótesis y de una refutación.
La hipótesis se expresa en términos de una disonancia cognitiva tan simple como dramática en los tiempos que vivimos.
La disonancia cognitiva (o paradoja) a la que nos referimos es: ¿Cómo puede ser que con el enorme arsenal de conocimientos científicos y de todo tipo, la humanidad en su conjunto cada vez viva peor?
Es como si viajáramos tod@s en un coche tan atestado de libros y de carpetas que hasta se nos atasca el volante delante de una curva muy cerrada.
La respuesta al dilema es muy sencilla. Es, como en los cuentos de hadas, un cofre muy preciado que permanecía escondido y lleno de telarañas.
El tesoro virgen por explorar son los numerosos descubrimientos científicos de las últimas décadas que, a pesar de su enorme relevancia para tod@s, siguen atascados en las especialidades que los parieron sin que el resto de la humanidad, prácticamente se haya enterado.
Y esto no es culpa de l@s científic@s, solamente. Aunque preferimos dejar la culpa a un lado porque este descubrimiento era tan sencillo de hacer que se le podía haber ocurrido a cualquiera.
Además, ni a los grupos ecologistas, entre los que nos incluimos, tras toneladas de papel criticando los transgénicos, se les ocurrió aprovechar la ocasión para difundir una de las teorías más revolucionarias de la biología actual. Los transgénicos, que todo el mundo ha oído hablar de ellos, son la forma más sencilla de explicar el transvase continuo y universal de genes, y por tanto de información, que bacterias y virus llevan a cabo, desde que existen, entre todas las especies del planeta.
L@s científic@s especialistas son esclavos de lujo en esta sociedad. Tienen el privilegio, como alquimistas que son, de traducir la vida en un lenguaje “telescópico” que solo conocen un reducido grupo de personas en el mundo. Son fábricas de conocimiento, capaces de llenar en 24 horas toda la superficie de la tierra en un texto continuo y gigantesco de letra times 12.
Pero claro, ese arsenal de conocimientos no es conocimiento útil si no hay traductor@s que la lleven a un lenguaje sencillo y comunicable. Y este es el gran regalo de reyes para tod@s l@s niñ@s del mundo.
Para comprender conjuntamente y con urgencia tantos descubrimientos científicos tan novedosos, se requieren mentes despiertas y poco adiestradas cuyas redes neuronales se activen con la máxima libertad posible.
En otras palabras, se requiere una gran capacidad de imaginación. Y por eso animamos a l@s niñ@s de todas las edades a traducir para l@s especialistas y para toda la sociedad, todos estos descubrimientos científicos.
Para ello, nos hemos inventado un juego. El juego se llama “la magia de gearry póker”, porque como podrán comprobar, la ciencia actual no tiene nada que envidiarle a la mejor ciencia ficción que podamos imaginar.
Imagínense, por poner un solo ejemplo, que la telepatía existe y es una forma de comunicación instantánea con los demás seres vivos. Eso lo ha descubierto la ciencia y se llaman las neuronas espejo, o neuronas wifi como nos gusta decirles.
El juego, al mismo tiempo, es un experimento científico que consiste en demostrar, que quizás no llegue al 0,7 % l@s especialistas que han citado alguna vez los descubrimientos de su propia disciplina y/o de otras disciplinas.
Curiosamente, es tal la revolución que hay por ejemplo en el conocimiento de las bacterias, que en biología al menos, el concepto de disciplina se tambalea, porque toda la biología, inevitablemente, pasa a ser parte de la bacteriología.
El juego permitirá fácilmente saber el grado de conocimiento de l@s jóvenes actuales en un mundo tan mezclado y comunicado que se ha convertido en una auténtica universidad planetaria.
La idea es que las comunidades escolares que lo deseen participen en este juego que además de ser entretenido resulta superpráctico, ya que permitirá ponerse al día a la sociedad en la era de la comunicación y de la supervivencia.
Basta que las comunidades educativas pongan todo su potencial en esta tarea-juego durante solo dos semanas después de reyes, y podemos honradamente garantizar que se habrán puesto al día en suficientes conocimientos y con el interés suficiente como para seguir indagando por su propia cuenta. Y por la cuenta que les trae, ya que además de estar en juego su propia supervivencia, l@s chavales podrán demostrar que, el menos en esta ocasión, no necesitarán realizar exámenes. Los resultados de su aprendizaje colectivo ell@s mismo serán los primeros en difundirlos por todos los medios posibles: carteles, internet, periódicos, televisión, radio, etc, con lo que podrán ser evaluados por todo el mundo.
¡Felicidades! ¡Mam8n@s! o ¡Mamon@s! lleva un ocho (o infinito) porque representa un nuevo código de comunicación y de educación denominado “copylife”, o community-learning-life (la vida como comunidad de aprendizaje).
“Copylife” es una extensión del conocido “copyleft”. Todo el conocimiento es colectivo. Y lo que pretendemos con el “copylife” es que la autoría de nuestras obras refleje este carácter inalienablemente colectivo de todo el conocimiento.
Para publicar un artículo con “copylife”, basta añadir al título un ocho entre paréntesis (8), explicar esto bajo el título, e intentar que la autoría sea lo más colectiva posible. Ya sea porque son dos o más los autor@s, ya sea porque el nombre se pone entre paréntesis, en minúsculas, con apodo, etc,... Lo importante del “copylife” es la reflexión que abre sobre el individualismo en la comunicación (que siempre es colectiva).
En educación, el código “copylife” invita a colocarnos en el aula sentad@s en círculo (o en “U”), para multiplicar la capacidad de aprendizaje de la comunidad educativa; y también a tratar de que la evaluación sea más cualitativa y colectiva, y menos cuantitativa e individualista; ya que como demuestra el descubrimiento de las endorfinas, de la psiconeuroinmunología, y de las neuronas espejo (o wifi), el aprendizaje más rápido es el placentero, que se mueve desde la libertad y no desde la obligación.
Una palabra clave: La asociación “iniciativas de sostenibilidad, medioambiente y autogestión” de andalucía, lleva unos años desarrollando y probando un nuevo paradigma de la biología y del conocimiento llamado simbiodiversidad, que aunque aquí la presentemos como una palabra clave para comprender y actuar según lo expresado en este llamamiento, en sí no tiene ningún mérito especial, si partimos, como dijimos, de que todo el conocimiento es colectivo.
Simbiodiversidad es el “concierto-fusión” que resulta de mirar desde la especialidad de la biología animal hacia fuera, hacia todos los lados, e ir integrando desde ahí todos estos conocimientos científicos de última generación y tan relevantes; y que sinceramente creemos que son vitales para la humanidad.
En internet podrán rastrear, si se sienten motivad@s, como nosotr@s, a partir de esta palabra clave y otras que vayan encontrando.
Y ahí está también el juego: nuestra asociación no es un gran equipo de investigación universitario, y por ello la información que hemos ido elaborando desde la reflexión-acción, se encuentra de momento dispersa por la red y otros medios. Y esperamos que lo comprendan: la simbiodiversidad, como conocimiento colectivo, es un proceso de aprendizaje continuo y abierto, donde cada cual puede fácilmente incorporarse.
Cuando reenvíen información, les invitamos a no citar la simbiodiversidad (ni algún nombre individual en alguna ocasión asociado a ella) más de lo necesario. De hecho, no hace ninguna falta citarlos, ya que lo importante no es el nombre, sino toda la red de conocimiento que hay detrás, que la construye, y que seguimos contado aquí y allá.
Recordemos, finalmente, que la invitación-felicitación que hacemos, a tod@s l@s niñ@s del mundo es a traducir en lenguaje sencillo y divertido la ciencia más actual y decisiva.
Y aquí va otra pista para las guerreras y guerreros gearry póker: “al gore: ¿por qué no te Gaias?”
¡UN FUERTE ABRAZOTE PLANETARIO!¡Y FELICIDADES MAM8N@S!
¡Felicidades! Mam8n@s!
¡Felicidades! ¡Mamon@s! Es un llamamiento simpático a toda la humanidad, a sus niñ@sy, y en particular a l@s mayas, para felicitarl@s y agradecerles su apoyo por un gran descubrimiento que acabamos de hacer.
El descubrimiento consta de una hipótesis y de una refutación.
La hipótesis se expresa en términos de una disonancia cognitiva tan simple como dramática en los tiempos que vivimos.
La disonancia cognitiva (o paradoja) a la que nos referimos es: ¿Cómo puede ser que con el enorme arsenal de conocimientos científicos y de todo tipo, la humanidad en su conjunto cada vez viva peor?
Es como si viajáramos tod@s en un coche tan atestado de libros y de carpetas que hasta se nos atasca el volante delante de una curva muy cerrada.
La respuesta al dilema es muy sencilla. Es, como en los cuentos de hadas, un cofre muy preciado que permanecía escondido y lleno de telarañas.
El tesoro virgen por explorar son los numerosos descubrimientos científicos de las últimas décadas que, a pesar de su enorme relevancia para tod@s, siguen atascados en las especialidades que los parieron sin que el resto de la humanidad, prácticamente se haya enterado.
Y esto no es culpa de l@s científic@s, solamente. Aunque preferimos dejar la culpa a un lado porque este descubrimiento era tan sencillo de hacer que se le podía haber ocurrido a cualquiera.
Además, ni a los grupos ecologistas, entre los que nos incluimos, tras toneladas de papel criticando los transgénicos, se les ocurrió aprovechar la ocasión para difundir una de las teorías más revolucionarias de la biología actual. Los transgénicos, que todo el mundo ha oído hablar de ellos, son la forma más sencilla de explicar el transvase continuo y universal de genes, y por tanto de información, que bacterias y virus llevan a cabo, desde que existen, entre todas las especies del planeta.
L@s científic@s especialistas son esclavos de lujo en esta sociedad. Tienen el privilegio, como alquimistas que son, de traducir la vida en un lenguaje “telescópico” que solo conocen un reducido grupo de personas en el mundo. Son fábricas de conocimiento, capaces de llenar en 24 horas toda la superficie de la tierra en un texto continuo y gigantesco de letra times 12.
Pero claro, ese arsenal de conocimientos no es conocimiento útil si no hay traductor@s que la lleven a un lenguaje sencillo y comunicable. Y este es el gran regalo de reyes para tod@s l@s niñ@s del mundo.
Para comprender conjuntamente y con urgencia tantos descubrimientos científicos tan novedosos, se requieren mentes despiertas y poco adiestradas cuyas redes neuronales se activen con la máxima libertad posible.
En otras palabras, se requiere una gran capacidad de imaginación. Y por eso animamos a l@s niñ@s de todas las edades a traducir para l@s especialistas y para toda la sociedad, todos estos descubrimientos científicos.
Para ello, nos hemos inventado un juego. El juego se llama “la magia de gearry póker”, porque como podrán comprobar, la ciencia actual no tiene nada que envidiarle a la mejor ciencia ficción que podamos imaginar.
Imagínense, por poner un solo ejemplo, que la telepatía existe y es una forma de comunicación instantánea con los demás seres vivos. Eso lo ha descubierto la ciencia y se llaman las neuronas espejo, o neuronas wifi como nos gusta decirles.
El juego, al mismo tiempo, es un experimento científico que consiste en demostrar, que quizás no llegue al 0,7 % l@s especialistas que han citado alguna vez los descubrimientos de su propia disciplina y/o de otras disciplinas.
Curiosamente, es tal la revolución que hay por ejemplo en el conocimiento de las bacterias, que en biología al menos, el concepto de disciplina se tambalea, porque toda la biología, inevitablemente, pasa a ser parte de la bacteriología.
El juego permitirá fácilmente saber el grado de conocimiento de l@s jóvenes actuales en un mundo tan mezclado y comunicado que se ha convertido en una auténtica universidad planetaria.
La idea es que las comunidades escolares que lo deseen participen en este juego que además de ser entretenido resulta superpráctico, ya que permitirá ponerse al día a la sociedad en la era de la comunicación y de la supervivencia.
Basta que las comunidades educativas pongan todo su potencial en esta tarea-juego durante solo dos semanas después de reyes, y podemos honradamente garantizar que se habrán puesto al día en suficientes conocimientos y con el interés suficiente como para seguir indagando por su propia cuenta. Y por la cuenta que les trae, ya que además de estar en juego su propia supervivencia, l@s chavales podrán demostrar que, el menos en esta ocasión, no necesitarán realizar exámenes. Los resultados de su aprendizaje colectivo ell@s mismo serán los primeros en difundirlos por todos los medios posibles: carteles, internet, periódicos, televisión, radio, etc, con lo que podrán ser evaluados por todo el mundo.
¡Felicidades! ¡Mam8n@s! o ¡Mamon@s! lleva un ocho (o infinito) porque representa un nuevo código de comunicación y de educación denominado “copylife”, o community-learning-life (la vida como comunidad de aprendizaje).
“Copylife” es una extensión del conocido “copyleft”. Todo el conocimiento es colectivo. Y lo que pretendemos con el “copylife” es que la autoría de nuestras obras refleje este carácter inalienablemente colectivo de todo el conocimiento.
Para publicar un artículo con “copylife”, basta añadir al título un ocho entre paréntesis (8), explicar esto bajo el título, e intentar que la autoría sea lo más colectiva posible. Ya sea porque son dos o más los autor@s, ya sea porque el nombre se pone entre paréntesis, en minúsculas, con apodo, etc,... Lo importante del “copylife” es la reflexión que abre sobre el individualismo en la comunicación (que siempre es colectiva).
En educación, el código “copylife” invita a colocarnos en el aula sentad@s en círculo (o en “U”), para multiplicar la capacidad de aprendizaje de la comunidad educativa; y también a tratar de que la evaluación sea más cualitativa y colectiva, y menos cuantitativa e individualista; ya que como demuestra el descubrimiento de las endorfinas, de la psiconeuroinmunología, y de las neuronas espejo (o wifi), el aprendizaje más rápido es el placentero, que se mueve desde la libertad y no desde la obligación.
Una palabra clave: La asociación “iniciativas de sostenibilidad, medioambiente y autogestión” de andalucía, lleva unos años desarrollando y probando un nuevo paradigma de la biología y del conocimiento llamado simbiodiversidad, que aunque aquí la presentemos como una palabra clave para comprender y actuar según lo expresado en este llamamiento, en sí no tiene ningún mérito especial, si partimos, como dijimos, de que todo el conocimiento es colectivo.
Simbiodiversidad es el “concierto-fusión” que resulta de mirar desde la especialidad de la biología animal hacia fuera, hacia todos los lados, e ir integrando desde ahí todos estos conocimientos científicos de última generación y tan relevantes; y que sinceramente creemos que son vitales para la humanidad.
En internet podrán rastrear, si se sienten motivad@s, como nosotr@s, a partir de esta palabra clave y otras que vayan encontrando.
Y ahí está también el juego: nuestra asociación no es un gran equipo de investigación universitario, y por ello la información que hemos ido elaborando desde la reflexión-acción, se encuentra de momento dispersa por la red y otros medios. Y esperamos que lo comprendan: la simbiodiversidad, como conocimiento colectivo, es un proceso de aprendizaje continuo y abierto, donde cada cual puede fácilmente incorporarse.
Cuando reenvíen información, les invitamos a no citar la simbiodiversidad (ni algún nombre individual en alguna ocasión asociado a ella) más de lo necesario. De hecho, no hace ninguna falta citarlos, ya que lo importante no es el nombre, sino toda la red de conocimiento que hay detrás, que la construye, y que seguimos contado aquí y allá.
Recordemos, finalmente, que la invitación-felicitación que hacemos, a tod@s l@s niñ@s del mundo es a traducir en lenguaje sencillo y divertido la ciencia más actual y decisiva.
Y aquí va otra pista para las guerreras y guerreros gearry póker: “al gore: ¿por qué no te Gaias?”
¡UN FUERTE ABRAZOTE PLANETARIO!¡Y FELICIDADES MAM8N@S!
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