Yo creo que si Michel Serres ("El Paso del Noroeste") se topa con estas reflexiones, a lo mejor las aprueba. Desde el desborde creativo que nos llevó a definir la zimby o simbiodiversidad, en "Meando Fuera del Testo" (ver en google), como una conjunción entre las Ciencias (Biodiversidad) y las Letras (Diversidad Cultural), a través del sentido común, no hemos hecho más que seguir soldando esas antiguas "rencillas" entre ambos abanicos del conocimiento.
La formulación que simplificamos en el título de este post: "Ciencias = Sentido Común = Letras", trata precisamente de sintetizar el papel de puente tan decisivo que adjudicamos, tras nuestra pródiga experimentación de estos años, al sentido común.
Indudablemente, y ese sería el papel de la divulgación, el sentido común puede conectarse con los saberes doctrinales y especializados. Tanto de un bando (Ciencias) como del otro (Letras). Siguiendo una cierta lógica, podemos derivar de este aserto que si el sentido común conecta con ambos abanicos del conocimiento, ambos abanicos del conocimiento pueden ser a su vez conectados entre sí a través del sentido común.
De ahí que hayamos optado por esa fórmula de igualdad e identidad entre los tres términos nombrados. "Ciencias = Sentido Común = Letras".
Esto nos anima a pensar de momento que la tarea es posible. Que es posible llegar a soldar de nuevo, desde el lenguaje científico, ambos enjambres de saberes que habían sido divorciados a lo largo del proceso histórico de separación y especialización que ha caracterizado más de un siglo en la historia reciente de la Ciencia (y de las Letras: aunque aquí hemos optado por esta diferenciación entre Ciencias y Letras, y creo que se entiende lo que queremos decir, consideramos ambas parte del acervo científico, en general, donde se tiende a considerar todo ciencia o ciencias, sin por tanto rebajar en ningún sentido "Las Letras", respecto a "Las Ciencias", ni viceversa.
El lenguaje resultante de nuestro entretenido empeño, que ustedes pueden comprobar en nuestros testos, se acerca a lo que llamamos hipersentido común, en tanto manejamos mucha ciencia que hemos dado en llamar "virgen", pues circula poco, la verdad, por las carreteras formales (aulas universitarias, por ejemplo), que en simbiosis creativa con el sentido común (materializado asimismo en múltiples diálogos a pie de calle con diversas gentes y colectivos sociales), nos regala un lenguaje sin duda nuevo. Este lenguaje, construido en parte a partir del sentido común, se manifiesta como un lenguaje atrevido, optimista, que nos empodera y nos lleva a contagiar este empoderamiento, a las personas...
Este empoderamiento proviene de la seguridad que ofrece un conocimiento tan fresco como el generado en las últimas décadas. Sin duda el hecho de que no sea corriente poner a dialogar tantas teorías tan nuevas como diversas, entre sí y, a simismo, con ayuda del sentido común, produce una sensación de auténtico regalo, o regalazo...
Las redes neuronales generan, sobre la marcha, nuevas conexiones y nuevas neuronas, procedentes de las células madre neuronales, a medida que tu mente y tu cuerpo, y tus sistemas sensoriales, se adentran en nuevos territorios. Puede ser una nueva afición que practiques en donde vives, o un viaje a otro lugar, significativamente diferente, o una amistad nueva. En cualquier caso, son nuevas carreteras ante nuevas situaciones que son construidas en tus redes neuronales. Cuando llevas unos meses en un país extraño y consigues ya ensamblar una cierta retahíla de palabras en las conversaciones, de tal modo que al principio ni tú mismo te lo crees, tal pericia en esa lengua antes extraña, es el resultado, entre otros, de haberse construido esas nuevas conexiones neuronales, de forma que empiezas a decir determinada frase, en esa lengua antes extraña, y de pronto te salen por fín las palabras con una fluidez que te parecía días antes imposible de alcanzar.
Las cuatro joyas de la neurociencia del siglo xxi: abducción, neuronas espejo, ecolocación y células madre neuronales, te garantizan el éxito y el optimismo en tus quehaceres. El siglo xxi nos regala un poder personal, individual, grupal, organísmico que sitúa al ciudadano actual en una tesitura bien diferente de como lo hacía la neurociencia antes de estos descubrimientos...
En realidad la neurociencia ha abierto caminos sin retornos,con trechos que estan mas iluminados que otros ,que nos permiten visualizar nuestros esquejes neuronales hasta su floracion.Esto nos permite recorrerlo de una forma tan imaginativa como certera, donde el dominio preponderante de la ciencia se alía con el sentido comun y este a su vez con la magia de las letras.
ResponderEliminarYsaaka newton
Ich weiß das!
ResponderEliminarbarak allah ufik
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