Los Baños del Carmen: Un espacio en libertad

Constituyen un territorio emblemático para la ciudad, tanto por su historia y su valor cultural, como por sus valores paisajísticos y de Biodiversidad. Y tales valores se ven actualmente incrementados debido a las grandes transformaciones que ha sufrido el entorno urbano de Málaga, tanto en su superficie construida como en el incremento del espacio dedicado al tráfico, así como el incremento de la densidad del tráfico.
Todo ello hace que Los Baños del Carmen se hayan ido convirtiendo en las últimas décadas en un remanso de paz, donde lo urbano se funde con lo rural y con lo litoral. La otrora Ciudad del Paraíso, que cantara Salvador Rueda se ha ido encogiendo en forma de pequeños enclaves dispersos, entre los que cabe destacar Los Baños del Carmen, por muchos motivos que ya han sido señalados en otras alegaciones presentadas a este PGOU y que complementamos aquí con otra serie de consideraciones.
El mismo Ministerio de Medio Ambiente, en su informe relativo al proyecto de rellenado con 90.000 metros cúbicos de arena de cantera de las actuales playas del Balneario, indica que la principal causa de la progresiva pérdida de arena es el calentamiento global. A pesar de esto, el proyecto implica un enorme consumo de energía, y materiales además de económico, por lo que contribuiría de manera significativa al calentamiento global, aún más si tenemos en cuenta que el rellenado tendría que repetirse periódicamente tras los temporales.
Al igual que las canalizaciones de los ríos, entre ellos la del cercano Guadalhorce, con tanto impacto paisajístico, los paseos marítimos, como el que el PGOU contempla en Los Baños del Carmen, son obras de gran impacto sobre el territorio y el paisaje que poco a poco van a ir siendo desmanteladas, para restaurar el territorio, tal como se está haciendo más allá de nuestras fronteras.
Si es así, ahorrémonos trabajo y recursos, y no construyamos más. ¿Para qué?
Uno de los valores más enriquecedores del Balneario, especialmente de su lado oriental, reside en su aspecto asilvestrado. Se trata de un bosque de eucaliptos junto a una playa con rocas recubiertas de algas. Este bosque prácticamente no se ha tocado desde el cierre del antiguo camping, en 1993. El tapiz de hojas en el suelo, desprovisto prácticamente de otra vegetación, y su relieve tan llano, lo hacen un lugar abierto y espacioso ideal para múltiples actividades espontáneas o programadas, que se han ido desarrollando allí durante todos estos años. Y esto demuestra que no se trata de un lugar abandonado. Por el contrario, la agresividad creciente de la ciudad ha ido haciendo que este tipo de territorios sea cada vez más preciado, como un refugio vivo, en especial por la generación que por desgracia no ha tenido la oportunidad de disfrutar otros tiempos en que la ciudad era mucho menos agresiva. Y en los Baños del Carmen han podido encontrar una playa, visitable en cualquier época del año, complementada con un bosque que en conjunto forman un paisaje único en todo el litoral de la provincia.
La ideas que exponemos en esta alegación se nutren en buena medida de las sensaciones y emociones recogidas entre las personas que han hecho suyos los Baños del Carmen, tras vivirlos un largo período de tiempo. Recíprocamente, al mismo tiempo estas personas se han ido integrando en Los Baños del Carmen, por lo que ya forman parte del Balneario. Y las conversaciones surgían, como es lógico, cuando les planteábamos la inminente posibilidad de la destrucción de este emblemático enclave contemplada en el PGOU.
Ha cambiado tanto la estética de ciertas partes de la ciudad en estos años, que cualquier espacio que se aleja de esa estética, por otra parte tan ajena a nosotros, puede ser considerado como “abandonado”. Abandonadas si que están en Málaga miles de viviendas sin ocupar, amenazadas por la especulación y por la ruina forzada, mientras a los jóvenes les cuesta cada vez más trabajo acceder a una vivienda digna. Proponemos desde aquí que el PGOU contemple y solucione este gravísimo problema, en vez de arrebatar a los jóvenes de todas las edades un espacio público, y para nada abandonado, como son Los Baños del Carmen.
La potencialidad de los Baños para uso ciudadano, y con mínimas intervenciones, resultaría increíble para las mentes acostumbradas a calcular exclusivamente los dineros que unas cuantas empresas pueden extraer de un territorio. A estas personas las invitamos desde aquí, como parte de nuestra alegación, a disfrutar y compartir este territorio con sus habitantes, para que poco a poco descubran otras formas más humanas de vida, y puedan de este modo aprender con, y de, las nuevas generaciones.
Nuestra propuesta implica la restauración de los jardines y del edificio del restaurante mediante la creación de un taller-escuela. De este modo la restauración se haría a un ritmo más acompasado, en consonancia con los ritmos que se respiran en el lugar, y lejos de la violencia que hemos tenido que presenciar en los jardines del centenario Parque, donde la sensibilidad ha brillado por su ausencia.
Este taller-escuela sería abierto, es decir, con la posibilidad de que las personas que disfrutan del lugar puedan aprender también cada una en la medida de sus posibilidades.
El resto del territorio, proponemos que los pequeños cambios a realizar sean autogestionados por la gente que lo habita cotidianamente. Y del tipo de lo expresado por otras personas de la Asamblea por la Supervivencia de los Baños del Carmen.
Antiguamente había baños separados para hombres y para mujeres. Hoy día, es cada vez más frecuente el nudismo espontáneo en los Baños del Carmen. En base a la legislación vigente, y como defendió un juez en una sentencia dictada en el País Vasco hace unos años, el nudismo se puede ejercer en libertad no solo en las playas, sino en cualquier espacio público. Por lo que ya resulta inadmisible la existencia de playas “nudistas”. (al igual que resultaría inadmisible la antigua separación hombres/mujeres) Y los Baños del Carmen son un lugar privilegiado para esta convivencia de bañistas con más o menos ropa. Y no nos vamos a extender aquí en una crítica del puritanismo actual en torno a estos temas. O respecto a las ventajas que supone para el desarrollo y la salud de las criaturas el contacto, no solo visual, con el estado natural del cuerpo.
El hecho de ser una playa con rocas, la de levante, posibilita otra forma de acercarse al ecosistema marino, muy distinta de las artificiales playas arenosas. Y de disfrutar, en plena ciudad, de una gran biodiversidad sumergida, incluso a muy poca profundidad. Cystoseira tamariscifolia es un alga parda indicadora de aguas limpias y oxigenadas, que forma comunidades en el Balneario de elevada biodiversidad, es decir, con muchas otras especies tanto animales, vegetales, como bacterias y protoctistas, y que figura por su elevado interés biogeográfico en el libro editado por la Junta de Andalucía sobre “Bosques y praderas sumergidas de Andalucía”
El roquedo sumergido del Balneario presenta una alta diversidad y singularidad en el contexto de la Bahía y de la Provincia de Málaga. Es muy rico en Dátiles de Mar (Lithophaga lithophaga y otras), que son especies protegidas de gran interés. Además hay que resaltar su importancia como criadero de pesca, en una bahía cada vez más esquilmada.
La lista completa de biodiversidad sumergida incluye, como mínimo, varios centenares de especies, y está en fase de inventariación por parte de diversos equipos de investigación de la Universidad de Málaga, que consideran a los Baños del Carmen como un enclave de gran interés que en ningún caso debería ser destruído ni en su totalidad ni en parte, debido al rellenado artificial de arena de las playas adyacentes.
La línea de contacto mar-tierra en los Baños del Carmen no es nada homogénea, sino muy diversa, a pesar de tratarse de un territorio muy chico. De Poniente a Levante, encontramos:
1) una playa de arena,
2) una antigua escollera que circunda la terraza del restaurante,
3) una playa de piedras de tamaño mediano y uniforme, que con la marea baja muestra su original belleza,
4) un borde de rocas sueltas, que rodea la zona de las pistas de tenis hasta la playa de levante, rica en Datiles de Mar, y
5) la playa de levante, que es de arena con rocas con algas.
Toda esta diversidad debe conservarse frente a la amenaza de rellenado artificial, que acabaría homogeneizándolas.

La presencia del muro norte es imprescindible para mantener el microclima de la zona. No solo resguarda del viento, junto a los árboles, también resguarda de la contaminación acústica. Y lo que no es menos importante, de la contaminación lumínica.
La playa-bosque es un lugar privilegiado para disfrutar, por ejemplo, de la visión del cielo, ya que está protegido de la luz directa de las farolas de los espacios circundantes. Hay iluminación suficiente para poder transitar de noche por la zona, debido a los rayos oblicuos de luz provenientes de afuera, pero al mismo tiempo es posible disfrutar de la sombra de la luna sobre los árboles.
Y el fuego. Disfrutar en círculo del fuego hecho de cortezas de eucalipto en el Balneario mientras se comparten conversación y sentimientos, es una experiencia única si tenemos en cuenta que estamos prácticamente en el centro de la ciudad. Por otra parte no hay peligro de incendio por las características, ya descritas, del bosque. Y cuando el fuego se va consumiendo, allá que acudimos de nuevo al bosque, como las tribus recolectoras, a buscar más cortezas, que los árboles nos siguen regalando cada noche.

Claro que los eucaliptos son una especie exótica, al igual que la gran mayoría de las especies de plantas de la ciudad y, cada vez en mayor medida, también son de origen exótico los habitantes humanos de Málaga.
Pero eso no le quita ni un á pice de su valor cultural ni de su valor de uso, ya que hoy día forman parte consustancial del ecosistema biológico y cultural. Desde aquel lejano día en que se plantaron para secar la charca de los patos, para evitar el paludismo. El suelo que ocupan es un suelo de relleno del antiguo embarcadero de hace 130 años, y que nunca fue ocupado por un bosque autóctono. Abogamos por una mínima sensibilidad por parte de los gestores de los que también depende el futuro de este territorio tan singular, PARA QUE NO SE REPITA LA MASACRE DEL PARQUE.
Existe una abundante población de la especie vegetal endémica litoral Limonium malacitanum que debe ser conservada a ultranza, ya que es exclusiva de la provincia de Málaga, y está protegida por la legislación andaluza y europea, y dada la degradación que, en general, caracteriza los terrenos donde se sitúan, o se situaban, sus otras poblaciones.
Entre las especies de jardín protegidas por las ordenanzas municipales destacan varios ejemplares de Washingtonia robusta uno de los cuales, muy esbelto y singular, embellece la playita de levante, y no ha sido incluido en los planos del proyecto municipal.


Todo lo que estamos contando en esta alegación, muestra además las grandes posibilidades del territorio para la educación.

Y para finalizar esta alegación, queremos añadir que quizás uno de los aspectos más sorprendentes del Balneario es esa mezcla que lo constituye, que invita a que las dicotomías mentales que, de alguna manera siguen dominando la cultura occidental se diluyan, convirtiendo a Los Baños del Carmen en un espacio en libertad.