Es un libro muy recomendable para comprender el llamado divorcio
sensorial, de la cultura patriarcal. David Abram es psicólogo y
ecologista. Y está escrito con esa magia directa de plasmar en palabras lo
que sientes con tus sentidos. Analiza la relación entre chamanismo, y
fenomenología de la percepción, la escritura griega...judaísmo...
Es libro fácil de leer, sin tecnicismos. A raiz de su descubrimiento
impartí la única charla unipersonal, ex-profeso, que he dado en treinta
años en la universidad.
En el encontré que la letra A proviene de una cabeza de vaca, y la M es el
agua, como una ola...
Al fín y al cabo, el chamán es el científico generalista. Su no
profesionalización estricta, le permite realimentar permanentemente su
sabiduría, saboreando precisamente el ecosistema (en todos los sentidos).
En este sentido resulta más que creible la anécdota del chamán en el
documental "¿Y tú que sabes?", ya que comprobamos cada día como se nos
habían escapado explicaciones científicas super-sencillas, hasta que un
día la inspiración de alguien va y nos regala esa explicación.
Cuando he hablado en esta lista del destrozo territorial de estos años, y
de su aparente invisibilidad en el inconsciente colectivo, es porque es
otra demostración más, como la de los inmigrantes/as, de que teórica-mente
al menos, estamos dotados de organos sensoriales, pero en la práctica
vivimos con una ceguera de lo que nos rodea que hace pensar todo lo
contrario.
El funcionamiento del cerebro y su exploración de nuevos campos de redes
neuronales, que producen pensamientos y asociaciones de ideas nuevas
(novum: no-vistas antes)y que es la base de la innovación, está en
relación directa con la sensibilización de nuestro propio cuerpo, entero,
es decir, mucho más allá del cerebro, del que se habla tanto que
pareciera, como hemos dicho una isla.
Nuestra sensibilización corporal, está determinada por las variaciones y
cambios que se dan en nuestros cuerpos, es decir, en buena medida en la
DIVERSIDAD DE SUS MOVIMIENTOS.
Una cultura que mandó la danza "al carajo", y que hoy día es una especie
en extinción en los centros de enseñanza y universidades, era una cultura
que estaba ya condenada a la obsolescencia, es decir, a su
neurodegeneración progresiva.
Autismo, Alzheimer, Hiperactividad, Afaxia, y un muy largo etc...no son
más que los claros sintomas de la afaxia, hiperactividad, alzheimer y
autismo que nos hemos ido inyectando en esta curiosa cultura educada como
en la cámara de deprivación sensorial de la película "ShortBus".
El televisor nos regalaba esta mañana con esta joya: "Tienen pelo,...y se
mueven". Era la explicación que daba una monitora ante el éxito de la
rehabilitación de las criaturas diagnosticadas con hiperactividad o
autismo conviviendo con lobos de mar. "Tienen la piel suave". Fijaros,
profundamente si quereis, en estas expresiones. Lo dicen todo. ¿Tocarnos?
lo menos posible; el pelo, tampoco está de moda, una barba salvaje es una
especie rara hoy día, estadísticamente hablando. Pero lo mejor es: "...y
se mueven". Sí, los lobos de mar se mueven, no faltaba más; pero los
humanos en general, y los estudiantes en particular, de moverse ¿cuanto?
Participo en una asignatura de proyectos de ciencias ambientales. El
alumnado expuso recientemente sus trabajos en el salon de grados. Y un
compañero les decía "que tenían que moverse con más soltura en el
escenario". ¿Pero cómo diablos se van a mover? Le contesté yo, si hoy es
el primer día de curso que me he pegado el gustazo de ver los cuerpos
completos de nuestros/as alumnos/as, ¡moviéndose! ya que el resto de los
días, en clase, inmóviles y atrapados entre las bancas...
-- ecologista. Y está escrito con esa magia directa de plasmar en palabras lo
que sientes con tus sentidos. Analiza la relación entre chamanismo, y
fenomenología de la percepción, la escritura griega...judaísmo...
Es libro fácil de leer, sin tecnicismos. A raiz de su descubrimiento
impartí la única charla unipersonal, ex-profeso, que he dado en treinta
años en la universidad.
En el encontré que la letra A proviene de una cabeza de vaca, y la M es el
agua, como una ola...
Al fín y al cabo, el chamán es el científico generalista. Su no
profesionalización estricta, le permite realimentar permanentemente su
sabiduría, saboreando precisamente el ecosistema (en todos los sentidos).
En este sentido resulta más que creible la anécdota del chamán en el
documental "¿Y tú que sabes?", ya que comprobamos cada día como se nos
habían escapado explicaciones científicas super-sencillas, hasta que un
día la inspiración de alguien va y nos regala esa explicación.
Cuando he hablado en esta lista del destrozo territorial de estos años, y
de su aparente invisibilidad en el inconsciente colectivo, es porque es
otra demostración más, como la de los inmigrantes/as, de que teórica-mente
al menos, estamos dotados de organos sensoriales, pero en la práctica
vivimos con una ceguera de lo que nos rodea que hace pensar todo lo
contrario.
El funcionamiento del cerebro y su exploración de nuevos campos de redes
neuronales, que producen pensamientos y asociaciones de ideas nuevas
(novum: no-vistas antes)y que es la base de la innovación, está en
relación directa con la sensibilización de nuestro propio cuerpo, entero,
es decir, mucho más allá del cerebro, del que se habla tanto que
pareciera, como hemos dicho una isla.
Nuestra sensibilización corporal, está determinada por las variaciones y
cambios que se dan en nuestros cuerpos, es decir, en buena medida en la
DIVERSIDAD DE SUS MOVIMIENTOS.
Una cultura que mandó la danza "al carajo", y que hoy día es una especie
en extinción en los centros de enseñanza y universidades, era una cultura
que estaba ya condenada a la obsolescencia, es decir, a su
neurodegeneración progresiva.
Autismo, Alzheimer, Hiperactividad, Afaxia, y un muy largo etc...no son
más que los claros sintomas de la afaxia, hiperactividad, alzheimer y
autismo que nos hemos ido inyectando en esta curiosa cultura educada como
en la cámara de deprivación sensorial de la película "ShortBus".
El televisor nos regalaba esta mañana con esta joya: "Tienen pelo,...y se
mueven". Era la explicación que daba una monitora ante el éxito de la
rehabilitación de las criaturas diagnosticadas con hiperactividad o
autismo conviviendo con lobos de mar. "Tienen la piel suave". Fijaros,
profundamente si quereis, en estas expresiones. Lo dicen todo. ¿Tocarnos?
lo menos posible; el pelo, tampoco está de moda, una barba salvaje es una
especie rara hoy día, estadísticamente hablando. Pero lo mejor es: "...y
se mueven". Sí, los lobos de mar se mueven, no faltaba más; pero los
humanos en general, y los estudiantes en particular, de moverse ¿cuanto?
Participo en una asignatura de proyectos de ciencias ambientales. El
alumnado expuso recientemente sus trabajos en el salon de grados. Y un
compañero les decía "que tenían que moverse con más soltura en el
escenario". ¿Pero cómo diablos se van a mover? Le contesté yo, si hoy es
el primer día de curso que me he pegado el gustazo de ver los cuerpos
completos de nuestros/as alumnos/as, ¡moviéndose! ya que el resto de los
días, en clase, inmóviles y atrapados entre las bancas...
"El lenguaje de la simbiodiversidad es el lenguaje de la complejidad: enlazando muy diversos temas con lenguaje sencillo y nada especializado, por lo que los especialistas pueden aprender a patinar en él"
Test de AutoJiliPoiesis:
barcelona.indymedia.org/newswire/display/332369/index.php
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